Un lugar común en mi vida diaria es el asombro que siento al descubrir el funcionamiento interno de alguna tecnología y pensar, simultáneamente, cuán ingenuamente la usamos a diario. Más allá del hype alrededor de la inteligencia artificial, del que no participo, la computadora moderna sigue siendo una de las invenciones más sofisticadas y asombrosas de la historia.
Hoy descrubrí cómo funciona un disco duro y no tengo palabras para expresar mi asombro. Siento que es la clase de maravillas que justifica el experimento humano en su conjunto. Recordé la Biblioteca de Alejandría, que albergaba (de acuerdo a ciertas estimaciones) el equivalente a unos 100.000 libros modernos. Asumamos que un libro promedio, en formato PDF (digamos), pesa entre 5 y 20MB y denotemos $S$ a esa cantidad. El peso de la Biblioteca de Alejandría sería
$$ T = 100.000 \times S = \begin{cases} 500 \text{ MB}, & \text{si } S = 5 \text{ MB} \\ 4TB, & \text{si } S = 20 \text{ MB} \end{cases} $$
Asumamos una densidad del disco duro de 1Tbit/in$^2$ (un terabit por pulgada al cuadrado), que es razonable. Entonces el área necesaria para guardar toda la Biblioteca de Alejandría sería 2x2 pulgadas (5x5cm) si tomamos PDFs de 5MB o 4x4 pulgadas (10x10cm) si tomamos PDFs de 20MB. En ambos casos, un disco duro puede contener toda la Biblioteca de Alejandría en un espacio físico menor a la palma de una mano.